¿Pero si quién soy yo? Esas preguntas no se deberían de hacer, dejemos que mi patria hablé por mí. Mexicana de hueso colorado y con orgullo de ser del Norte, porque de ahí es Monterrey.
Me llaman por el nombre de Ana, 22 años en este mundo, feliz de ser regiomontana y amante de un México percudido. Sí, vengo desde el Cerro de la Silla y vengo con todas las ganas de sultana.